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Mostrando entradas de junio, 2008

Pliegues -Despliegues

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http://plieguesdespliegues.blogspot.com/ Gente, se larga nomás el viaje de los hojitas, pliegues, o como quieran llamarlo. En esa dirección podés leer más sobre el tema, y si te interesa participar, allí aparece el mail donde podés contactar a Romi y a Gaby. Despliegue en Argentina, España y Venezuela.
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balbuceo el amor la muerte y la palabra me quedo tiesa esperando el mejor momento del diluvio el tiempo de las palabras húmedas cayendo como tibia lluvia veraniega pero el balbucear no me aproxima al lenguaje sino a un silencio comedido a los instantes en que la mudez me rapta balbuceo el miedo pero nunca lo pronuncio sólo surgen sonidos rastros de porvenir anhelados pero la virtuosa palabra queda dentro callada y dolorosa raspando las paredes de este cuerpo balbuceo el amor y el deseo por medio de un cuerpo mudo las palabras se arrojan al otro y desafiantes aproximan sus bocas en el corazón del amado y muy en silencio y al oído se atreven a pronunciar el deseo más hermoso

Yolanda Pantin

Vitral de mujer sola Se sabe de una mujer que está sola porque camina como una mujer que está sola Se sabe que no espera a nadie porque camina como una mujer que no espera a nadie Esto es se mueve irregularmente y de vez en cuando se mira los zapatos Se sabe de las mujeres que están solas cuando tocan un botón por largo tiempo Las mujeres solas no inspiran piedad ni dan miedo si alguien se cruza con ellas en mitad de la vereda se aparta por miedo a ser contagiado Las mujeres solas miran el paisaje y se diría que son amantes de las aceras/ de los entresuelos/ de las alcantarillas/ del subsuelo de los subterfugios Las mujeres solas están sobre la tierra al igual que sobre los árboles les da igual porque para ellas es lo mismo Las mujeres solas recitan parlamentos estoy sola y esto quiere decir que está con ella para no decir que está con nadie tanto se considera una mujer sola Las mujeres solas hacen el amor amorosamente algo les duele y luego todo es más bien triste o colérico o simple
mi miedo es tener el deseo en la boca y nunca pronunciarlo
Mi cuerpo se parece al cuerpo de un ave. El pájaro que guardo dentro cava en mi garganta una multitud de verbos. Sacrifica mi abdomen triturando los bordes profundos. Mi boca no puede soltar el miedo. Crepito debajo de la noche. Quien escribe ha palpado la enfermedad más espantosa: el miedo al abandono

La conversación

El lenguaje es una piel: yo froto mi lenguaje contra el otro. Es como si tuviera palabras a guisa de dedos, o dedos en la punta de mis palabras. Mi lenguaje tiembla de deseo. La emoción proviene de un doble contacto: por una parte, toda una actividad discursiva viene a realzar discretamente, indirectamente, un significado único, que es "yo te deseo", y lo libera, lo alimenta, lo ramifica, lo hace estallar (el lenguaje goza tocándose a sí mismo); por otra parte, envuelvo al otro en mis palabras, lo acaricio, lo mimo, converso acerca de estos mimos, me desvivo por hacer durar el comentario al que someto la relación. Roland Barthes "Fragmentos de un discurso amoroso"
mi boca ha soltado sus pájaros y yo he escapado en busca de mi voz
un fragmento oscuro escribo a diario una búsqueda urgente y dolorosa me recorre viajo a través del cuerpo hacia un río plagado de palabras voy ciega e imprecisa por un camino polvoriento mis vestiduras apenas me sostienen me circundan a diario sombras y delirios

Cuestionamiento

¿Cómo le borro a mi nombre la cualidad de ser intangible?
poseo una palabra frondosa depositada en mi vientre una palabra que se parece a tu boca ella ha tardado tanto en aprender a hablar que sus palabras surgen descorchadas y solas ahora tendré que sembrar nuevas raíces
lloro todos los mares del mundo mi casa navega hacia tierras lejanas mis libros ruedan a manos ajenas a este cuerpo le sucederá tal vez otro y así sucesivamente mi llanto es un barco que viaja liviano no sé para dónde se dirige tiene el rostro griste las manos solas y desesperadas temen abrazar las tempestades este llanto es un viajero cansado que carga valijas de olvido su cuerpo roído por el tiempo pareciera volarse perderse en el infinito lloro el llanto más importante aquél que marcará mi suerte mis manos contienen una amargura irremediable mi poesía crece entre mis ojos ¿dónde coloco tantas palabras fútiles? mi ropa je renacerá fuerte y el barco me dejará justo frente al olvido

Alborada

i qué habrá sido del hombre que me mordió la boca hasta sangrarme ii no sé mi nombre de memoria porque siempre me olvido aquél que tiene olor a infancia iii soy una mujer dolida sin nombre me contemplo ante el espejo y ambos nos descubrimos huérfanos iv he caminado por los jardines más esplendorosos pero nunca como esa mañana en que vos y yo conocimos la ternura. v te vi y algo en mí te pronunció bajito vi tu nombre me recorre el cuerpo tu cuerpo me recorre el nombre vii mi palabra es un gran árbol que echó raíces en tu nombre