La pantera. Susana Villalba

Matar al animal

requiere un animal

sin sombra.

Vas caminando por un monte

o te parece, no sabés dónde estás;

creés que lo sabías

cuando llegaste.

Ese negro

bien puede ser una pantera

o mujer,

no te das cuenta.

La mirada salvaje te gusta,

no, te calienta.

No, te mira

como quien no comprende

dónde está.

Ya estás perdida,

tendrías que llevarla a tu casa

pero sabés cómo termina:

un animal herido

siempre ataca.

Tendrías que matarla,

ahora,

antes de que sea tarde

o por piedad.

Pero esa mirada es una trampa,

si es pantera

sabe matar mejor

que vos.

Nadie sabe tu nombre

aquí

y ahora él

o mujer te da la espalda.

Pensás en un Remington

liviano

de distancia corta.

Pero nadie escucharía,

Red Hot los distrae,

a vos también.

Y no se mata por la espalda,

lo viste en las películas

o creés en eso.

Matar

es otra cosa.

Ahora te mira y ya sabés,

vas a llevarla a tu casa.

Está tocado por la gracia,

está a la vista

o vos lo ves, no estás segura,

o tiene algo

que creés comprender.

Y sin embargo

sabés cómo termina:

no sabés cómo

te hirió si te quería.

No querés acercarte,

te mira como miran los gatos

cerrando los ojos.

Es un hombre

por la manera de fumar,

se apoya en la barra

frente a vos,

los dos están perdidos.

Pensás en el Remington,

nunca tuviste uno.

Matar es otra cosa.

Nadie parece comprenderlo,

el negro tampoco pero ve

que tenés un cigarrillo

en la mano

y otro ardiendo

en el cenicero;

se acerca y lo fuma.

Estás perdida,

creés saber cómo termina

y volvés a equivocarte,

apaga el cigarrillo

y se va.

Ahora nadie

se parece a tu deseo.

Y es que no se parecía.

Una pantera perdida

en su memoria

o forma de mirar

o lo que fuera

que no vas a saber.

Tomás un taxi pensando

demasiada belleza no es el móvil,

es la coartada.

Para matar a una pantera

hay que cerrar los ojos.

Comentarios

-> ha dicho que…
vero, qué increíble, por dios, no me canso de decirlo. busqué "matar a un animal" y me dijeron que está agotado, así que gracias por subir estas cosas... te lo robo (me lo guardo). un abrazo muy grande
Verónica Cento ha dicho que…
Yo tengo ese libro. Lo editó una editorial en Caracas que al parecer ya no existe. Es hermosísimo. Hay un poema que quisiera postear que se llama "Una Verónica perfecta". Un amigo me regaló ese libro hace un par de años, justamente por ese poema.

Qué lindo verte por acá.

Beshotes!
-> ha dicho que…
es lindo volver (por fin las casi vacaciones y un poco más de tiempo de leer y visitar amigos, y compartir lecturas).
de paso te hago un pedido especial, cuando puedas, que postees el poema. estoy imprimiendo todo lo que encuentro de ese libro para tenerlo cerquita. un abrazo enorme.
adaev ha dicho que…
que bella es tu voz,que suerte haberla encontrado,con toda mi admiración:adaev
Verónica Cento ha dicho que…
Prometo postearlo. Besos, Romi
Verónica Cento ha dicho que…
Gracias, Adaev. Besos

Entradas populares de este blog

Alborada

Fragmentos de Antonia Palacios