Sucede que de pronto comienzo a temblar de miedo y de angustia y tomo un libro, lo abro y leo:


"Si no hay coraje, que no se entre. Que se espere el resto de la oscuridad delante del silencio, solamente los pies mojados por la espuma de algo que se expande desde dentro de nosotros. Que se espere. Un insoluble por el otro. Uno al lado del otro, dos cosas que no se ven en la oscuridad. Que se espere. No el fin del silencio, sino el auxilio bendito de un tercer elemento: la luz de la aurora"


Clarice Lispector. Aprendizaje o el libro de los placeres. Madrid, 1990. 

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