Hijos de su madre
A vos, Romina,
porque detrás de nuestras conversaciones
siempre rondan los fantasmas
porque detrás de nuestras conversaciones
siempre rondan los fantasmas
hijos de su madre
ellos
que tiritan bien adentro
que gimen una vez más
en busca de mi boca
en busca de estos pechos
pero como me falta tanta misericordia
se acurrucan pariendo odio
golpeando el rostro
para que hable
y mugen encabritados
y arañan mi cuerpo
hijos de su madre
ellos
todos
inclusive él
que habita
en la hora del sueño
y me desvela a mitad de la noche
y al oído
con mis ojos ya muy abiertos
columpia el cuerpo
hacia la sombra del corazón
para que nunca desate
este cuerpo del suyo
y para que mi lengua
quede recordándolo
una vez más
en medio de la siesta
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abrazo, abrazo, abrazo : )