Habíamos quedado en no llorar
vos derramaste tres lágrimas superfluas
me desgarraste
mojaste mi café
inundaste mi escritorio
ahora me dan muchísimas ganas de dejarme ir.
yo por mi cuenco.
aún mi palabra sangra agua de tu vientre
y el café me parece insulso desde ese día.
desde esa muerte.
(2001)
Comentarios
saludo bloguero
e invitacion a leer una novelita cortisima que empece a poner en los coleoptero
salut!
excelente Vero
un super abrazo
Un saludo.
Gio.
pasé por tu blog y leí la novela. Te dejé un comentario allá. besos
Este poema tiene muchísimos años. Le coloqué año 2001 pero creo que es como del 99 ahora que me puse a recordar. Tiene mucho pasado dentro, tal vez por eso me dio cierta nostalgia al subirlo. Gracias por tu constantes lecturas. Un besote.
Este es un poema de aquellos!
Supongo que de los tiempos en que te llamaba mihija.com
Tiene el equilibrio perfecto para significar el dolor de una despedida pero no anclarse definitivamente en él.
las lágrimas siempre cambian todo
pareen enemigas, con el tiempo
logramos entenderlas y ver a traves de ellas con más claridad
un beso escribiente
Si supieras que me acuerdo el porqué lo escribí en su momento, qué sentí al hacerlo, quién hizo que escribiera esas palabras...quizás para algunos sea común recordar el poema e inmediatamente recordar qué dolor te hizo escribir eso, sin embargo a mí no me sucede eso. Hay muy pocos poemas, incluidos los que escribí a mi esposito, que los recuerdo nítidamente. Concuerdo con vos: este poema tiene ese tinte de aquellos tiempos tan lindos e inolvidables...se acuerda¿?
Ojalá poesia.com vuelva de nuevo! abrazos
Pronto iré a tu isla. Me encantaría conocerte! Estarás por allá?
Beshotes
DB